... y a mí últimamente me ha dado por la cocina. Y es que me gusta cocinar... y comer, por supuesto! Siempre estoy ideando cosas ricas, y aprovechando que últimamente no viajamos tanto los fines de semana, pues hago algún platillo rico para quitar las ansias y las penas de la rutina diaria. Así que me da por probar platos nuevos, y mi pobre costillo aguanta con toda la estoicidad de la que es capaz los logros y socarrones que acometo día tras día (un besito, cariño, que te lo mereces) eso sí, siempre con buena cara y sin dejar nada en el plato. ¿Qué más se puede pedir? ¡¡Si luego friega los platos y todo!!
En fin, a lo que iba. Que me he enganchado a varias webs/blogs con recetillas que me tienen encantada, y que os dejo por aqui por si os pica el gusanillo...
Lo primero es el blog de cabezadeajo de donde saqué la inestimable receta del Brownie al microondas que tantas alegrías nos ha dado. Queda perfecto, rico, rápidísimo y más sencillo no puede ser... Apto para torpes del bizcocho (entre las que me declaro). Hoy he traído uno al trabajo y de momento no quedan ni las migas... y eso que no le hemos puesto el helado de vainilla!!
Si el menú a realizar necesita del toque "casero" de toda la vida, sin duda hay que buscar algo en Recetas de mamá. Cocina de toda la vida... o no tanto a veces, lo cual no quiere decir que sean los mismos platos trillados que todo el mundo conoce. Bien explicado, con fotos, ricoooo... Y muchísimos postres! También para torpes, rápido y distinto os recomiendo el Enrollado de pollo al microondas. Una web realmente cuidada.
Y para terminar es obligatorio citar un blog que me tiene realmente enganchada, tanto por sus recetas como por las explicaciones y comentarios que las rodean. Se trata de Cocina para impostores de Falsarius Chef (Secretos de cocina que nadie contó), y su apabullante lema "Frente a la cocina de mercado, cocina de supermercado". Incontestable. Recetas impostoras a base de latas, congelados y cualquier cosa que te quede por la nevera, elevados a la categoría de manjar, elaborados de tal manera, rápida y sencilla, que una lata de sardinas se convierte en alta cocina a los ojos de cualquier incauto. Adictivo el reto de "engañar" a las visitas más recelosas con recetas "impostoras" dignas de un rey.
Hale, pues ya me he explayado bastante por hoy. A ver si voy poco a poco con esto del blog, como diría aquel... sin prisa pero sin pausa. Otro día, pensamientos menos voraces y más profundos.
Cambio y corto. :P
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